Este verano 2018 nos ha dejado muchas anécdotas para recordar, risas compartidas que, seguro, rememoraremos en el frío invierno y sobre todo, muchos nuevos amigos.
Desde Alemania a Andalucía o desde Irlanda a Madrid, cada campista del Rinlo Costa nos ha aportado algo. Algunos, algún que otro susto que, por fortuna, solo fue eso, un susto viajero. Otros, nos han regalado un pedacito de su talento artístico, y otros tantos, nos han contagiado con su alegría, del norte o del sur, ¡pena que el moreno no se pegue igual de bien!
¿Qué más podemos pedir? Bueno sí, que para el año ¡más y mejor! Que a los que vinisteis para una noche que volváis el 2019 pero para más noches, que a los que no llegasteis a venir, que aquí seguiremos esperándoos, y que a los que ya repetisteis por segundo año, ¡que no dejéis de venir!
Apagamos maquinaria, amig@s.
P.D. ¡Excepto el cortacésped! ¡No queremos que os encontréis una selva al volver!